La propia Ministra de Empleo y Seguridad Social está a punto de dar punto y final a los Servicios de Prevención Ajeno financiados por las mutuas. Hasta el 31 de diciembre del 2014, las entidades deberán desprenderse totalmente de sus SPA, de lo contrario “entrarán en causa de disolución”. Además, el Gobierno contará que junto a dichas ventas, se facilite el cobro de la deuda a la Seguridad Social, el cual asciende a 40 millones de euros.
Todo ello aparece en la Ley de Mutuas, todo ello, entre otras cosas, con el fin de eliminar la competencia entre mutuas, las cuales utilizan a su favor los recursos y medios públicos que los otros Servicios de Prevención no disponen. Además, las nuevas sociedades que aparezcan dejarán de tener cualquier denominación relacionada con las entidades de la Seguridad Social. Todo ello con el riesgo que la medida cause la captación de empresas asociadas y una muy poco deseable competencia entre mutuas que podría llegar a afectar el mercado de los Servicios de Prevención en general.
¿Cómo creéis que esta nueva Ley va a afectar la cultura preventiva de las empresas y el trabajo de los Servicios de Prevención Ajeno?
Fuente: expansion.com