El amianto (conocido también como el asbesto) es el nombre común de un grupo de minerales, cuyas fibras son de gran utilidad debido a su enorme resistencia, siendo de esta manera, un recurso muy utilizado a lo largo de muchos años. Actualmente, debido a su extrema peligrosidad, su uso está prácticamente prohibido en la Unión Europea. Actualmente, existen muchas situaciones en la que es fácil encontrar dicho material.
Qué debemos saber del amianto:
¿Qué es y cómo puede afectarme?
- El amianto es un mineral incombustible, de estructura fibrosa, muy resistente al calor, a la electricidad y a la acción de muchos agentes químicos, así como también a la abrasión.
- Debido a su composición, si es respirado, el amianto se queda depositado en los pulmones y la pleura, causando a lo largo del tiempo graves enfermedades tales como la asbestosis (o amiantosis), el cáncer de pulmón y el mesotelioma. En exposiciones cortas, también puede producir irritación de la piel, los ojos y el tracto respiratorio.
- El riesgo de exposición puede encontrarse en muchas actividades, muchas de ellas relacionadas con la construcción, tales como fontaneros, instaladores, eletricistas, carpinteros, personal de mantenimiento, techadores, limpiadores o cualquier oficio con el que tengan que acceder en tejados o huecos donde haya la presencia del agente.
- Es obligación del empresario evitar que la exposición al amianto en el aire no supere el valor límite ambiental de exposición diaria (VLA-ED) de 0,1 fibras por centímetro cúbico, para un periodo de 8 horas.
¿Qué hago si creo que puedo estar trabajando con amianto?
- Let’s Prevent! Recomendamos la realización de formaciones para aquellas empresas y trabajadores cuyas actividades puedan suponer una exposición al amianto. Los Servicios de Prevención de Prevención Ajeno, así como entidades especializadas y centros de formación, pueden asesorar, informar y realizar formaciones relacionadas con el agente.
- Si se teme la presencia de amianto, antes de realizar cualquier actividad en la que se manipule, retire materiales, o se trabaje junto con ellos, deberá consultarse a empresas especialidadas o al Servicio de Prevención (ajeno o propio) e incluso a la autoridad laboral si fuera necesario. Mucha atención a los tejados de fibrocemento dónde es muy común encontrar amianto y cuya fragilidad puede dar complicaciones en su manipulación o deterioro.
- El propietario de un edificio, o cualquier empresa que trabaje en él, deberá saber si este contiene amianto. Esto se puede hacer consultando los planos del edificio, mirando la documentación de obras o trabajos anteriores, realizando una inspección (sin tomar muestras), consultando a terceros (arquitectos, peritos, vigilantes y trabajadores) que puedan aportar información o la contratación de empresas especializadas para la valoración o mediciones higiénicas necesarias.
- Todas aquellas empresas que trabajen con amianto, tienen la obligación de estar inscritas en el RERA (Registro de empresas con riesgo de amianto), realizar un Plan de trabajo (pueden contratarlo con empresas especializadas o Servicios de Prevención Ajeno) y si fuera necesario, realizar mediciones higiénicas (tomas de muestra y análisis de las mismas), tomando las medidas que fueran oportunas.
- Aquellos edificios en los que exista amianto, se deberá realizar una comprobación y las mediciones higiénicas oportunas. El amianto deberá ser retirado inmediatamente; de otro modo, también se puede recubrir con otros materiales. Existen multitud de empresas especializadas en el tratamiento o retirada de materiales con amianto.
- Los profesionales que quieran realizar mediciones de amianto, deben saber que existen básicamente dos tipos de medición, los cuales se deberán escoger según la necesidad. Ambos se utilizan con una bomba de aspiración y dependiendo del filtro aplicado, se podrá conocer la existencia de fibras (de cualquier tipo) en el ambiente o directamente la presencia del agente agresivo. Sólo con la segunda técnica se puede saber que realmente existe amianto, la elección dependerá del profesional, atendiendo a la experiencia y el tipo de actividad del empresario. Hay que tener en cuenta que la presencia de polvo puede obstruir los filtros de detección, por lo tanto, en algunos casos deberá repetirse varias tomas de muestra o incluso cambiar la técnica de muestreo.
- La Autoridad Laboral castiga severamente todas aquellas empresas que trabajen con amianto o cuyas instalaciones esté presente el agente y no hayan tomado las medidas oportunas, así como el registro al RERA y la realización del Plan de Trabajo.
Legislación y páginas de interés:
- Real Decreto 396/2006: trabajos con riesgo de exposición al amianto
- Gestión del RERA (gencat.cat)
- Información técnica del amianto (MTAS Gobierno de España)
- Guía técnica, Evaluación y detección de los riesgos de Amianto (INSHT)
- Ficha de información, trabajos con amianto (INSHT)
Algunas empresas especializadas con el amianto:
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